Xerach F. Smeding

Hace un mes recogía la terrible noticia del ataque chino con armas de fuego contra una columna de refugiados tibetanos en el paso himalayo del Nangpa-La. Activistas y defensores de los derechos humanos y de la causa tibetana orquestaron el pasado 30 de noviembre una protesta global contra las políticas represivas del gobierno comunista chino, y muy especialmente contra lo sucedido hacia finales de septiembre en el citado paso nevado. Esta protesta, que conmemoraba los dos meses desde la publicación de la noticia, ha venido acompañada de la creación de una nueva página web: http://www.chinawouldyoushootme.org/, en la que se invita a todos aquellos que nos repugnan este tipo de incidentes a que protestemos enviando una foto en la que exhibamos un cartel preguntándole a China si a nosotros también nos dispararía.

Aún hoy, desconocemos el paradero de 32 tibetanos que pertenecían a la columna de refugiados atacada [14 de los cuales son niños]. Estamos seguros de la muerte de una monja de la prefectura de Nagchu, Kelsang Namtso [de 17 años], y los indicios apuntan a la muerte casi segura de otra mujer, Kunsang Namgyal [24 años]. A continuación doy un listado provisional de aquellos reugiados menores de edad que, presumiblemente, se hallan detenidos por las autoridades chinas; en el presente caso, China estaría violando el Artículo 14 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, la Convención sobre el estatus de los refugiados de 1951 y la Convención sobre los derechos de los menores:

Impactante, cierto; pero no lo es más el hecho de que un preso político tibetano [acusado de actividades contrarrevolucionarias y separatismo, y condenado a 18 años de prisión], Jigme Gyantso, que se entrevistó en noviembre de 2005 con el comisario especial sobre torturas de las Naciones Unidas, parece haber sufrido abusos extremos [el International Campaign for Tibet afirma que ha estado hospitalizado durante gran parte del presente año a raíz de las torturas recibidas]. Al parecer, el citado monje participó en una protesta en mayo de 2004 en la que varios prisioneros de la temible cárcel de Drapchi [dedicada en exclusiva a presos políticos] gritaron eslóganos a favor del Dalai Lama y la independencia del Tíbet; las consecuencias fueron una inaguantable sesión de tortura china y un billete directo al hospital. Por las protestas, Gyantso fue condenado a 3 años más de cárcel, ergo, su salida de prisión está programada para marzo de 2014.

El comisario Manfred Nowak, afirmó en marzo del presente año que debido a que [Jigme Gyantso] fue condenado por cometer un crímen político, probablemente gracias a información extraída mediante torturas, exijo al Gobierno [chino] su inmediata excarcelación. El comisario especial sobre torturas también afirmó, en referencia a las prisiones tibetana que existe un palpable nivel de miedo y auto-censura entre los presos tibetanos.

Invito a todas y a todos que visiten la web www.chinawouldyoushootme.org y, si lo desean, mostrar su apoyo enviando una foto con el lema que os podeis bajar e imprimir de la misma página.