Elecciones holandesas
El panorama político de los Países Bajos es suamamente interesante. El país con la lesgislación sociopolítica más progresista y avanzada del globo, acudió a las urnas ayer [22 de noviembre] para elegir a un nuevo gobierno y a sus representantes en el parlamento [Tweede Kamer]. Hasta el momento, el gobierno de centro-derecha presidido por el democristiano P. Balkenende [el clon de Harry Potter] en coalición con los liberales del VVD [el PP español] había logrado gobernar con relativa normalidad junto a los apoyos punutales del ya extincto partido del ultra-derechista y demagogo [gay] Pim Fortuyn, asesinado en los anteriores comicios generales por un individuo de extrema izquierda.
Los democristianos del CDA, liderados por el acutal primer ministro Balkenende-Potter [jeje], parecen haber vuelto a ganar las elecciones con un 81% de los votos escrutados, pero pasarían de 44 escaños a 41 [pierden 3]. La gran sorpresa de la noche ha sido el avance de los ex-maoístas del Partido Socialista [PS], que pasan de 9 a 26 escaños; la segunda fuerza del país seguirá siendo el de los socialdemócratas del PvdA [PSOE español], aunque pasan de 42 a sólo 32 escaños.
Junto a la espectacular subida de los ex-maoístas del Partido Socialista, los que unidos con Groen-Links [Verdes de Izquierdas - que sólo pierde un escñao y se queda en 3], conforman la auténtica izquierda holandesa, hay que destacar el ascenso de un partido antimusulmán y xenófobo de extrema derecha, el PVV [Partido por la Libertad], que pasa a tener 9 escaños y se constituye en la quinta fuerza política de Holanda.
También bajan los socioliberales [liberales de izquierda] de D66, que pasan de 6 a 3 escaños, aunque en contraposición suben los cristianos de izquierda de CU [Unión Cristiana] que pasan de 3 a 6 escaños [probablemente arrebatados a costa de los socioliberales]. También hay que destacar, como nota anecdótica, la entrada en el parlamento del animalista PVD [Partido de los Animales] que pasa a tener 3 diputados en la cámara de representantes holandesa.
Lo más destacable de estas intensas elecciones es la importante diversidad ideológica del electorado holandés. El sistema electoral holandés está diseñado de tal forma, que técnicamente es imposible formar mayorías absolutas en el parlamento nacional. De esta manera, los holandeses han forjado una tradición política basada en alianzas [muchas de las cuales superaron las barreras dicotómicas de la izquierda y la derecha] de todo tipo, desde las tan extrañas grandes coaliciones entre los democristianos y los socialdemócratas, hasta las alianzas de partidos únicamente de izquierdas o de derechas.
El gran problema que se presenta es la dificultad para conformar un gobierno relativamente estable en un contexto de polarización del electorado. Se deduce por los resultados provisionales, que la crisis de la anterior coalición gobernante ha debido de pasar factura al centro-derecha holandés [especialmente para el partido hermano del PP español en Holanda, el VVD]. Balkenende necesitaría los escaños de la Unión Cristiana [6] para poder gobernar en una coalición junto con el VVD, pero los cristianos de izquierdas se niegan a formar parte de un gobierno en el que estén los liberales populares.
La segunda posibilidad pasaría por una gran coalición entre los democristianos y los socialdemócratas, pero para que esto se realizara Balkenende tendría que prescindir de su xenófoba ministra de inmigración y aceptar los planes socialistas para regularizar a los ilegales presentes en Holanda.
La tercera posibilidad es la de la formación de un gobierno de izquierdas liderados por los socialdemócratas del PvdA en coalición con los socialistas del PS y Groen-Links [Verdes de Izquierda], pero necesitarían del apoyo de los cristianos de CU e incluso del Partido de los Animales-PvD para gobernar.
La formación de gobierno se antoja realmente difícil, pero lo que no cabe duda es que la tradición democrática de los Países Bajos y la serenidad de sus habitantes no darán lugar a un clima de crispación extrema como el que vivimos en este país. Quizás los españoles deberíamos aprender algo del sistema político y social holandés.
